Hablando solos.
Te propongo un ejercicio de observación. La próxima vez que vayas caminando por una calle concurrida, fíjate en la cara de las personas que te cruzas en el camino. Casi seguro que no tardarás mucho en cruzarte con alguien que va moviendo los labios, como si hablara con alguien pero sin emitir sonido alguno. Si sigues observando no tardará en aparecer otra persona igual, y otra, y otra más. Efectivamente van hablando, pero consigo mismo. ¿Qué se estarán diciendo? ¿Acaso van tan absortos en su dialogo interior que no se dan cuenta de que van moviendo la boca mientras andan? Fijaros bien. Observar su rostro. Mirad si alguno de ellos sonríe mientras habla para su interior. Fijaros incluso... Leer más →