APILIDERAZGO: competencias del nuevo líder.
Ahora más que nunca, las organizaciones requieren nuevos líderes, con nuevos perfiles y una serie de habilidades «blandas» difíciles de encontrar y de medir en un proceso de selección. Esas habilidades blandas son intangibles y en gran medida se consiguen tras un gran trabajo de crecimiento personal y profesional. Normalmente las tienen personas inquietas con su desarrollo personal, aquellas que gustan de seguir creciendo y evolucionando cada día, aun cuando ya ocupen un puesto de responsabilidad.
Hasta ahora, se puede decir que había un consenso general en definir cuáles eran las competencias profesionales más buscadas en el mundo empresarial:
- Capacidad de trabajar en equipo.
- Flexibilidad ante incidencias y cambios de prioridad.
- Comunicación efectiva.
- Iniciativa adecuada a cada momento.
- Gestión del estrés y del clima laboral.
- Liderazgo y auto liderazgo.
- Orientación al cliente.
- Gestión del conflicto interno y externo.
Sin embargo, el nuevo paradigma laboral que se está imponiendo tras esta crisis, está poniendo en relevancia que existen otras competencias personales mucho más útiles y más valoradas en las organizaciones que requieren de un nuevo tipo de líder:
- CONFIANZA EN UNO MISMO: soy capaz de afrontar desafíos y superar obstáculos sin desbordarme, disfrutando y encauzando la situación.
- AUTO GESTIÓN EMOCIONAL: soy capaz de encauzar mis impulsos y emociones evitando consecuencias negativas.
- VISIÓN POSITIVA: tengo una perspectiva optimista y constructiva de lo que ocurre.
- GESTIÓN DEL ESTRÉS: se cómo canalizar situaciones de presión, situaciones difíciles y múltiples demandas.
- ASERTIVIDAD: puedo expresar con confianza y firmeza lo necesario para enfocar una situación y sostener el marco de acción adecuado.
- EMPATÍA: me intereso por comprender cómo se sienten los demás y establezco un vínculo emocional con ellos.
- TRABAJO EN EQUIPO: me siento cómodo trabajando con otros, aceptando sus propuestas aunque sean diferentes a las mías. Antepongo los intereses del grupo a los míos.
- FLEXIBILIDAD: me adapto a los cambios en diferentes situaciones.
- LIDERAZGO: soy capaz de involucrar a los demás en el proyecto asumiendo responsabilidades.
- INFLUENCIA: soy capaz de transmitir a otros argumentos y motivación. Puedo anticipar sus reacciones y obstáculos, y encuentro la manera de dialogar y actuar para evitarlos.
- COMUNICACIÓN: transmito ideas, visión, información e instrucciones con el tipo de exposición adecuada.
- DESARROLLO DE OTROS: estimulo y ayudo a los demás en su mejora haciendo que se valgan por sí mismos.
Las abejas acumulan más de 100 millones de años de éxito empresarial en sus colmenas.
Pero, ¿qué es el APILIDERAZGO?
En el mundo de las abejas se viene dando desde hace millones de años un sistema de liderazgo colectivo que funciona gracias al liderazgo individual de cada uno de sus miembros. Las abejas acumulan más de 100 millones de años de éxito empresarial en sus colmenas. En cada colmena hay un gran líder, la abeja reina, pero también hay unos 10.000 líderes individuales que toman decisiones por sí mismos y que poseen gran parte de las habilidades blandas que mencionaba antes.
Por tanto, hay un hermoso paralelismo entre las colmenas y las empresas, así como entre la abeja reina y el nuevo líder del siglo XXI. De ahí surge el término que he acuñado como APILIDERAZGO para describir las competencias que todo buen líder debe tener y que se encuentran en el comportamiento diario de la abeja reina.
Actualmente imparto un taller formativo sobre el APILIDERAZGO. Si quieres saber más sobre el apasionante mundo de las abejas y las competencias «blandas» de la abeja reina, ponte en contacto conmigo, haciendo clic en este enlace.
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2 Comments
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Estoy deacuerdo contigo Carlos. El modelo de líder ha cambiado. Para mí lo más importante en un líder es la laboriosidad, la coherencia y, sobre todo, predicar con el ejemplo. Como la abeja reina
José Antonio
Gracias por el comentario, José Antonio.
Así es, la abeja reina no dice a ninguna de sus «hijas» lo que tienen que hacer. Cada una de ellas asume su responsabilidad en un entorno en el que el liderazgo individual es tan importante como el colectivo.
Carlos.